Skeletor captura a Teela y Orko y los envía a ser encarcelados en el oscuro y lúgubre reino de Morragor, gobernado por un monstruo esclavizado esclavo de Skeletor. Pero el monstruo, a pesar de su apariencia espantosa, se muestra noble y amistoso, y trata a sus cautivos con la mayor dignidad. Mientras He-Man viaja para rescatar a sus amigos, Teela, al ver la verdadera personalidad del monstruo bajo la superficie, lo alienta a liberarse de su involuntaria devoción por Skeletor.