Los periodistas están siendo atacados en todo el mundo por hacer su trabajo. Julian Assange se enfrenta a una sentencia de 175 años por publicar si es extraditado a los Estados Unidos. La administración Trump ha pasado de denigrar a los periodistas como "enemigos del pueblo" a criminalizar prácticas periodísticas comunes que han servido durante mucho tiempo al interés público. La administración Trump está pidiendo la extradición del fundador y editor de WikiLeaks, Julian Assange, por publicar documentos del gobierno estadounidense que expusieron crímenes de guerra y abusos de los derechos humanos. Está detenido en la prisión de máxima seguridad HMP Belmarsh en Londres y se enfrenta a una sentencia de 175 años si es extraditado. Hay una guerra contra el periodismo y Julian Assange está en el centro de esa guerra. Si se establece este precedente, lo que le sucede a Assange puede sucederle a cualquier periodista.